jueves, 14 de agosto de 2014

Nuestro espacio de exterior

Hace unos días os enseñamos los rincones de nuestra casa, aunque en realidad está en general adaptada para Valeria. Me encanta ver casas donde hay niños, el riesgo de encontrarte trastos por medio no es más que signo de salud de los que viven ahí y a mi me encanta ver que en cualquier zona de la casa hay presencia de ello, al fin y al cabo la casa es de todos, pues a disfrutarla!

Ya os he contado más veces lo que nos gusta disfrutar de la naturaleza, cada vez que tenemos un rato libre escapamos al campo, o bien programamos alguna excursión, por eso cuando estamos en casa también necesitamos nuestro espacio al aire libre.
Tenemos dos terrazas, en la que pasamos la mayor parte del tiempo tenemos instalado el campamento Valeria y sus mascotas.
Os presentamos a Tambor (coneja), manuelita y copio (tortugas), y a nala nuestra perrita.









Junto a ellas tenemos todo lo que Valeria necesita: un puesto de venta hecho con provisiones que fuimos encontrando por casa, y su mesa sensorial. 












La gran ventaja que tiene la mesa sensorial es que es multiusos, lo mismo hace de cocina, que de mesa de ciencias, de cabina médica, mostrador de floristería, lavandería ... Nunca imaginé que podría ser tan usada, y sin costarnos ni un céntimo! 



Aquí tenemos unas semillitas recientemente plantadas, lo de levantarnos cada mañana a ver sí han brotado es tarea fija y además nos emociona.
Y también el tendedero para colgar la ropa y trapos.
A este espacio accedemos desde la cocina y desde el cuarto de estar por tanto es el punto clave de la casa, además la escalera nos lleva al patio que comunica una casa con la otra y es el punto de encuentro principal. A Valeria le encanta, baja a ver a los abuelos y se da chapuzones en la piscinita que la montamos, trastea con el patín de un lado a otro, investiga con las hormigas, y sobre todo el huerto urbano! Eso ha sido lo que verdaderamente la ha llamado la atención, plantó ella sus propias semillas y recogió sus frutos, cada día bajaba a ver sí los tomates estaban rojos y se ponía nerviosa al cogerlos a veces se colaba alguno verde, que luego poníamos al sol :P


El abuelo nos dejó por cortesía una pared entera para improvisar.



No hace falta hablar del amor por los animales que tenemos en nuestra casa, pero fueron unos días muy entrañables, desapareció y cuando ya lo tenía superado volvió a aparecer, mimos, juegos ... Y decidió que la tierra le tragase, no se por qué! :P
Pero algún día le volveremos a ver ... El Caracol! 
Gracias a él cantamos 20 veces al día y gracias a él Valeria tiene un trocito de su corazón reservado para cuando decida salir jaja.




A la entrada de nuestra "casita amor por la naturaleza y todo lo animal" tenemos un patio recibidor en el que decidimos instalarle a Valeria su chalet, sin hipoteca ni gastos de luz, agua ... Lo cierto es que su uso lleva un tiempo parado así que planeo algún cambio en él, algo que sea lo que la de la chispa de disfrutarla; quizás al ser un sitio de paso, o el calor que concentra no lo sé, pero tengo la clave : observaré detenidamente hasta averiguar cómo, cuando, dónde y por qué!. Ya os contaré.






Me encanta decorar, cambiar y crear espacios para mi pequeña, es cierto que no es bueno estar cambiándoles las cosas continuamente, pero cuando veo que algo pasa desapercibido la pregunto, la enseño y sí ella lo prefiere lo ponemos en otro sitio y sino pues a guardarlo para otra etapa.

Como es vuestro entorno hogareño?
Muchos besos de colores!

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